Este sistema mundo requiere a un
protagonista y este protagonista es el hombre. Es el hombre el que sale a
mostrar nuevos mundos.
El hombre medieval nunca hubiera buscado nuevos mundos, porque el mundo medieval era un mero lugar de pasaje en camino al reino de los cielos.
El hombre de la modernidad sale a buscar nuevos mundos. Este es el hombre capitalista. Este hombre necesita tener una subjetividad, necesita pensarse a sí mismo. Necesita saber quién es él. Necesita conocer la realidad exterior.
El hombre medieval nunca hubiera buscado nuevos mundos, porque el mundo medieval era un mero lugar de pasaje en camino al reino de los cielos.
El hombre de la modernidad sale a buscar nuevos mundos. Este es el hombre capitalista. Este hombre necesita tener una subjetividad, necesita pensarse a sí mismo. Necesita saber quién es él. Necesita conocer la realidad exterior.
Epistemológico es todo aquél
pensamiento científico de la realidad. El humanismo es esa concepción que parte
del hombre como sujeto centrado, a partir del cual es posible conocer todo lo
que hay en el mundo, a través del pensamiento, que es el origen de todo posible
filosofar. Descartes justifica metodológicamente, epistemológicamente y
filosóficamente que la realidad externa existe, a través del pensamiento.
Uno de los problemas que plantea
Descartes es que puede demostrar que existe el pensamiento, pero no puede
demostrar la existencia de las cosas. Todas las cosas que están afuera existen
porque si no existieran, Dios nos estaría engañando. Dios es infinitamente
veraz, es incapaz de engañar y si podemos ver todas esas cosas es porque Dios
no nos engaña.
Como vemos metodológicamente
descartes se contradice porque para demostrar la existencia exterior de las
cosas se remite no al pensamiento, sino al viejo pensamiento divino medieval,
se remite a Dios; y acá está su contradicción para demostrar la realidad externa, termina remitiéndose a dios.
La subjetividad como principio
fundante de la filosofía y como elemento a partir del cual se puede demostrar la
existencia de la realidad externa.
Freud produce la primera gran
herida del narcisismo del cogito cartesiano y es la existencia del
inconsciente.
Durante la edad media no existía
la filosofía, porque la verdad les era revelada por dios (teocentrismo), no se
buscaba la verdad porque solo bastaba creer en dios, leer los textos
evangélicos para tener todas las respuestas. Había una promesa religiosa de que
el sufrimiento de la tierra era para llegar al reino de los cielos, donde el
hombre encontraría la plenitud de la felicidad. Todo estaba resuelto no había
preguntas que hacer porque dios daba respuestas a todas las preguntas. La edad
media se caracteriza porque durante su período de casi XVIII siglos, la
historia quedó detenida, por no eran los hombres los que hacían la historia, se
sometían a la veracidad divina, el que hace la
historia es Dios. Y si a esto le agregamos el poder terrenal de la
inquisición, el hombre solo se dedicaba a trabajar la tierra, no necesitaban
buscar la verdad de las cosas porque era revelada por Dios. Las preguntas,
incertidumbres o dudas de los hombres las hacían durante su confesión en la
iglesia. El poder pastoral es el poder de los representantes de la iglesia en
el confesionario. El poder pastoral del
que habla Foulcault, es el poder de la confesión y luego este poder pastoral va
a ser reemplazado por el poder del Estado Moderno el que a través de las
ciencias, las prisiones, los manicomios, el psicoanálisis representa ese poder
pastoral. La confesión que el hombre medieval le hacía al cura es muy similar
al que el paciente le hace al psicoanálisis.
Para Foulcault el poder del Estado
moderno está en las nuevas instituciones que aparecen con la revolución
industrial y que él denomina como “instituciones de secuestro”.
El descubrimiento de América
significa la decisión del hombre de ir a la conquista de los territorios
nuevos, a través de la empresa capitalista para expropiar América. La conquista
española, significó la muerte de 50 millones de indígenas. Este genocidio
americano hecho por la Europa capitalista. Los piratas ingleses saqueaban y
robaban los barcos españoles que se llevaban los metales de América a España y
lo llevaban a Inglaterra para financiar y desarrollar el incipiente capitalismo europeo.
Descartes viene a poner al hombre
en la centralidad, desplazando a Dios, que ya no es más el centro que revela la
verdad a los demás hombres. Ahora es el hombre el centro, en tanto pensamiento,
sujeto, subjetividad.
Lo que dice Descartes es que el sujeto capitalista al cual él representa se define por la subjetividad. Ahora es el sujeto el que da fundamento a todo lo existente. Sujeto es todo aquello que subyace de todo lo que existe. El pensamiento es todo decurso filosófico, el punto de partida del razonamiento.
Descartes nos está diciendo que
el hombre se está adueñando de la historia, así es como surge el renacimiento.
El discurso del método, es el libro
que
Descartes escribió en 1637, es la base del pensamiento de la revolución burguesa de 1789 y con la revolución francesa es donde el hombre se pone en la centralidad y es el hombre de la burguesía capitalista el que comienza a hacer la historia.
Descartes escribió en 1637, es la base del pensamiento de la revolución burguesa de 1789 y con la revolución francesa es donde el hombre se pone en la centralidad y es el hombre de la burguesía capitalista el que comienza a hacer la historia.
Descartes es el héroe del
capitalismo burgués, porque se atrevió a dudar de todo, y dejó de pensar en Dios como todo principio supremo, con él surge la subjetividad capitalista, La
burguesía es el elemento fundante de toda la realidad.
La filosofía es la historia de
los desarrollos históricos, en los cuáles los filósofos forman parte de ello.
Descartes es aquél filósofo que descubre la subjetividad capitalista y se da un
proceso histórico donde el descubrimiento de América, Copérnico, Galileo,
Giordano Bruno, cuestionan el orden de la teología medieval. Se parte del sujeto que es el
punto indubitable del surgimiento del conocimiento de la realidad. “Pienso luego
existo”. Es lo que se denomina a las filosofías idealistas, que parten del Yo
para conocer la realidad.